Al decorar en Minimalismo, este estilo de decoración (para ser sinceros) a veces puede parecer un poco estéril y aburrido, ya que el Minimalismo suele favorecer una paleta de colores reducida y neutra, por lo que no suele ofrecer mucho dinamismo.
El maximalismo, por otra parte, a veces puede resultar un poco abrumador a la hora de decorar, haciendo que una habitación parezca abarrotada con demasiadas cosas a la vista.
El compromiso perfecto llega con una nueva tendencia interior: el minimalismo máximo. Este estilo combina lo mejor de cada uno de los mundos del diseño, encontrando el punto óptimo entre demasiado y demasiado poco.
El minimalismo maximalista adopta las formas sencillas del minimalismo con líneas elegantes en combinación con las formas abstractas del maximalismo, los colores atrevidos y los estampados llamativos. Los looks maximalistas-minimalistas suelen tener una fuerte conexión visual con el arte y los diseños modernos de mediados de siglo.
En el minimalismo maximalista a menudo se trata de piezas llamativas: un centro de mesa atrevido se convierte en el punto culminante de una habitación e incluso puede combinarse con una combinación de colores neutros para paredes y suelos.
Aquí tienes 5 formas (fáciles) de transformar tu espacio en una obra de arte maximalista-minimalista.
#1 A lo grande con el máximo minimalismo
La tendencia consiste en llamar la atención, ya sea con atrevidos centros de mesa, colores vibrantes o llamativas obras de arte a gran escala.
Así que puedes elegir un sofá o una silla llamativos (por ejemplo, con una forma asimétrica atrevida) o una alfombra extrovertida con un color o un estampado llamativos.
Otra forma de ir a lo grande con la nueva tendencia es elegir una gran obra de arte mural que capte la atención de todos. Los cuadros de gran tamaño con colores vibrantes y formas abstractas y atrevidas son perfectos para crear un look maximalista-minimalista en las paredes.
También puedes crear un look "Cuanto más grande, mejor" con papel pintado o murales llamativos y dinámicos.
#2 Minimalismo máximo de color
Puede decir adiós a los esquemas cromáticos neutros del minimalismo y dar la bienvenida a tonos vivos de todos los colores que transforman cualquier habitación en un espacio vibrante y lleno de energía.
En combinación con muebles de líneas limpias, el aspecto resultante nunca resultará excesivo, sino equilibrado y armónico.
La buena noticia es que no necesariamente tienes que invertir en muebles nuevos, sino que también puedes añadir accesorios decorativos a tu espacio. Un bonito jarrón de un color vibrante o unos cojines con estampados llamativos pueden tener el mismo efecto que un mueble nuevo.
#3 Minimalismo máximo con paredes blancas
Aunque el minimalismo máximo adopta el uso de colores fuertes, eso no significa que tengas que volver a pintar las paredes. En su lugar, puede utilizar paredes blancas como fondo contrario para su interior y decoración.
Como esta tendencia está tan centrada en el arte, puedes utilizar las paredes como lienzo en blanco: Frente a un fondo blanco, un sofá o una silla de colores vivos, un jarrón atrevido o una obra de arte llamativa resaltarán y se convertirán en el centro de atención del espacio.
#4 Presume de lo que tienes
Aunque el mantra del minimalismo es desordenar el espacio, en el minimalismo máximo está permitido presumir de las cosas. Lo importante es crear zonas dedicadas donde exponer tus objetos y hallazgos favoritos en lugar de esparcirlos por toda la habitación.
Al agruparlas manteniendo despejadas las demás zonas de la habitación, se crea un contraste intencionado que hace que la habitación parezca más dinámica.
#5 Minimizar el maximalismo
Ten en cuenta que esta tendencia no deja de ser minimalista. Así que no te excedas decorando con demasiados objetos ni crees paredes galería abrumadoras.
En su lugar, al seleccionar muebles, obras de arte y accesorios, concéntrese en el impacto en lugar de intentar maximizar la cantidad. Si quieres saber más sobre interiorismo minimalista, te recomendamos otro artículo de nuestra gama.
Para crear su propio ambiente, merece la pena explorar con más detalle los distintos estilos de mobiliario y descubrir sus propias preferencias.